lunes, 16 de enero de 2012

"lLOS VIEJOS... LOS CREADORES MÁS ANTIGUOS DE LA TIERRA" ...

Este es un homenaje a los Guerreros de la Luz, 
a los Guardianes de la Tierra 
 por el acto heroico que han realizado 
y están realizando con el amor salvaje 
venido de los inicios, 
en este viaje de vuelta a casa. 


¡Exploradores de lo desconocido, donde la brújula solo marca un punto inmortal!... Amantes mayores, honrados en las vastedades azules del Multiuniverso... ¡A la Belleza y a la Libertad que representan, el mayor honor!... Enamorados de las musas de las galaxias, de las sirenas de los mundos recónditos, de las sacerdotisas de los templos invisibles. Todo lo innombrable para ustedes, arcanos. Creadores de la más alta paz. Para ustedes el aire...


A los compañeros de viejas batallas
A la Raza Raíz, a las Semillas de Estrellas
A los Pioneros (los nacidos entre 1956 y 1963)
En este momento especial de la historia humana y universal
Somos Uno


Esta generación ha sido la última y la primera, la retaguardia y la vanguardia, sin vosotros esta resurrección no sería posible... Son ustedes el iceberg que ha avanzado en forma imperceptible y sostenida, rasgando el agua con su blancura y temple, con sus paredes cayendo en forma estruendosa, dejando constantemente a la luz un nuevo cuerpo más estilizado, riguroso y libre, tocado por la aventura del aire...


Estos viejos de barba blanca, descabellados, huesudos, altos, desarticulados de forma, a la luz de las velas del año 2012, melenudos, constituyen el temple de las nuevas generaciones, la fuerza desde la cual se nace, el nido, la paja, el barro y las ramas entretejidas y excavadas, las plumas resistentes, la raíz inquebrantable del légamo que agolpa los primeros rayos del amanecer; la primera furia, la vibración que se renueva, el estruendo de todas los marejadas; maremotos y volcanes apagándose y naciendo; la luz tenue del olvido en sus miradas pétreas y amantes, soberanas, con la dulzura de los cráteres en el sonido del trueno; oboes y ráfagas asaltando la costa de esta bahía soberbia: el nidal, la habitación donde nace y se incuba lo nuevo...


Estos viejos soberbios, somos tú y yo... Tú y Yo, los que desgastamos la Historia, el fin anunciado de la modernidad, el final del tiempo, la curvación del espacio tridimensional; los que hemos por primera vez muerto y nacido sin dejar el cuerpo, los que hemos pasado por la muerte estando vivos, los héroes soberanos de este momento.


Hemos sido alcanzados por la lava del volcán, y calcinados resplandecemos erguidos sobre la piedra negra, sobre el carbón de piedra, sobre el carbono que trasmutamos en alegría. Levantados desde la sangre quemada volamos nuestra voz, miramos con la nueva lluvia, la profundidad en nuestras manos, nuestros tendones abrazan lo vasto, estamos compuestos de caos... 


Somos los nuevos salvajes. Nuestro recuerdo activa la vida en el planeta Tierra. Somos los Shaumbra que aman las aves, el Juan Salvador Gaviota, las Tres Marías de esta organización que se estrena, la Osa Mayor, Alfa Centauro, esa luz de allá... ¡El amor salvaje!...


Los nuevos salvajes... en nuestros ojos la fuerza de la Nada; asumiendo nuestra divinidad, incorpóreos en el fragor de la niebla, indivisos, atenaceados por los aires, sueltos, bellos, supremos, más amantes...


¿Somos acaso esa Nada? nos preguntamos a veces, en el fragor de la antigua lucha que se transparenta; es que el viejo tiempo se trasluce en el nuevo mientras cede, es la ilusión, es Maya que persiste, que quisiera quedarse...


Las luces sincopadas, el Jazz secular, 
los Gaia, estos Unos.

El ancestro y el potencial coexistiendo 
en este ser antiquísimo

Descubriendo un nuevo giro, 
otra propulsión y velocidad.

Hermanados al vendaval, 
compuestos por luciérnagas, 
arrasados y santos.

Desguasando la estática, 
visionarios y canosos.

De tono magistral asumiendo la Maestría recordándola.

Con energía Platino.

Alusivos

Y referentes.

De vuelo magnético en la trama cósmica.

Canalizadores, conscientes de su Yo Superior.

Y del espectro angélico.

Ascendidos.

A una soledad que no es soledad sino Belleza.

Supremos en el musgo de la belleza

Acantilados en el musgo de la Belleza.

Indicados por el abismo.

Solanos en la lluvia.

Tendidos en el pasto.

Escuchando la nueva música, 
el nuevo sonido.

De pelo largo, bellos.

Esos somos.

Los viejos.

Amados por el Espíritu.

La Avanzada.

La nueva cruzada.

Los nuevos Templarios.

El temple.

De este sistema que se ha formado 
de múltiples visiones, de la Conciencia.

Amados viejos.


Los que expiramos con el antiguo paradigma, los que al mismo tiempo nacemos con la nueva conjunción...


La raza muerta y la raza naciente, la luz del mundo, los faros de la tormenta, los corazones y el alma...


El vendaval que asalta la playa, jironado por las luces de la tarde, desbocándose en la muerte de la mañana; hostiles y sacros, confusos por momentos en la dos energías que se confrontan y se baten a duelo... una que se resiste a morir con sus antiguas cofradías y sistemas de creencias... la otra con el amor vertiginoso e insoslayable; dos amantes convulsionados... dos guerreros sacándose tiras de piel... desconocidos expulsándose, la muerte versus la vida, la llegada de lo nuevo que no permite vejez ni ambigüedad...


Somos la piedra fundacional 
del nuevo arquetipo que hoy se inicia.


Todo este suceder es nuevo... comenzó el año 1987 con la Convergencia Armónica, no estaba previsto, el humano superó las expectativas del Universo; este cambio no estaba diseñado, no estaba indicado en ninguna bitácora de viaje...


Este modelo está naciendo de nuestras canas y arrugas, de nuestra experiencia en la vida del Cosmos. Esta surgiendo de nuestra odisea y vastedad, co-creamos con la inteligencia del infinito... Somos de una raza cósmica... Somos los descendientes y los guardianes de los registros... los guardianes de la Biblioteca Viviente, el santo grial, el recipiente y la luz liquida, y en esto no hay metáfora; es la certeza de lo que Somos...


Somos seculares y celestiales... Un Himno al Vacío... Una Región de la Nada en nuestros corazones, que sostienen algo imperecedero asistémico, crístico, querible... que traemos de una luz olvidada, en nuestro esqueleto de luz desafiante, hipnótico, enceguecedor...


Somos la piedra angular y la piedra filosofal de este abismo que se aventura.


El misterio de los tiempos sin tiempo... es el vértigo que nos acompaña a donde vamos... por eso somos amados y odiados... conmovemos todo subsistema, toda creencia y postura... Somos el látigo de la luz y su flama minimalista y barroca a la vez... Estamos por sobre la cultura... y ya trascendemos los sucesos de la tercera dimensión... la dualidad cede ante nosotros, la antigüedad con el modernismo a cuesta voluptuosamente vomita a nuestro paso inmaterial y sísmico... Somos el Gran Maestro, el alquimista con sus piedras radiantes, la aventura más amada...


Hemos sido de todo, poetas, piratas, traficantes, místicos, fundamentalistas, comerciantes, asesinos, violadores, pintores, artesanos, guerreros, instructores de halcones, halcones peregrinos, fieras, mansos pastores, piedras, árboles, bailarines de circo, bufones de corte, compositores, músicos, actores, filósofos, sacerdotes, profetas, semióticos, arquitectos, mendigos, asaltantes, aventureros...


Cada uno de nosotros ha tenido cientos de encarnaciones en esta tierra y ha estado en otros mundos... ha creado civilizaciones y después ha encarnado en ellas teniendo roles importantes... como en la Atlántida, Lemuria, Mu, Egipto, Grecia y otras conocidas o perdidas en las edades... ha ayudado a crear también otros planetas y sistemas de vida; los viejos somos dioses creadores habitando en cuerpos humanos...


Gracias a nosotros este nuevo sistema que comienza puede tener paz, constituimos sus raíces...


Somos los viejos ángeles curtidos 
en el afán terrestre.


Somos los antecesores y la fuerza del Ahora. Somos el amor cristalizado y venido desde la Cueva de la Creación; sagrados; lo más alto que aquí permanece... Somos nosotros los que comenzamos este canto que imperecedero se extiende trazando un puente entre las distintas dimensiones, entre las distintas conciencias, este canto envolvente en la cúpula celeste...


Toda la belleza y la libertad 
sangran en nuestro canto.


Ustedes han tenido muchos papeles, muchas asignaciones y muchos deberes... ¡Ustedes son los Guardianes de la Sabiduría, los Guardianes de la Tierra, los Chamanes Angélicos, los Bailarines del Fuego... Caminantes del Sueño, Guerreros de la Luz, Cambiadores de Forma, Seres Estelares, Ancianos... Portadores de Fuerza y ¡Sanadores del tiempo! Amantes profundos...


Ven, ustedes son los solucionadores de problemas, los renegados, ¡los destructores del paradigma!... expertos navegantes que saben exactamente dónde las corrientes son peligrosas, dónde las mareas se estrellan contra las rocas… y los Enviados saben cómo evitarlas, cómo pasar por allí, cómo navegar, cómo mantener el lastre... Ellos son los maestros... con experiencia en muchos campos, y en su amplia reunión, brindan un conocimiento colectivo, que no tiene paralelo en la tierra, en ningún momento, ni en la historia de los planetas...


¡Ustedes son los vencedores!... El clamor de la vida en la Tierra... Las aguas, los vientos.. Los vuelos del cóndor, la transparencia en la lluvia... El Amor más feroz... los insignes rebeldes, que hoy ya fuera del Yo: se rinden, se rinden a todo... ¡Ustedes son los rebeldes rendidos!...


Que el Amor los ensalce... Que toda la lluvia sane vuestras heridas... Que las nieves los levanten más allá de las galaxias... Vuestros corales sumergidos atraviesan los universos...
Maestros invisibles...


LOS VIEJOS... LOS CREADORES MÁS ANTIGUOS DE LA TIERRA...

-Versión ampliada y corregida-


Por: Roberto Maruri Ampuero


Enviado por: Lida Spears... lidaspears@gmail.com